Dynamite Baits

5 mayo, 2022 | Carpa | Angler Blogs | Tips | Artículos | Novedades

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En ocasiones planificamos una sesión en un escenario concreto, nos hacemos una idea de la zona que queremos atacar, la estrategia que vamos a seguir y los cebos que vamos a emplear según nuestra experiencia o basándonos en la de otros pescadores. Pero luego llegan las sorpresas; el agua no está como pensábamos, el clima no se ajusta a la previsión, los peces no están en la zona, aparecen peces de pequeño tamaño, los cangrejos se han activado antes de la cuenta, las tortugas atacan nuestros cebos sin parar… En este artículo os voy a enseñar a conseguir capturas esquivando las tortugas o mejor dicho, a los galápagos.

Para empezar, vamos a conocer un poco más a estos peculiares reptiles.  Podemos encontrarlos en medios acuáticos, tanto naturales como artificiales. Se distribuyen por zonas que van desde el nivel del mar hasta los 1.000 metros de altura. Aunque se les puede encontrar en zonas con cauces de ríos y en lagos, prefiere los lugares con escasa corriente y abundante vegetación.

Estas tortugas tienen un periodo del año donde se encuentran más activas, comenzando por la primavera. Dependiendo de las temperaturas, el periodo donde comienzan a estar más activas se atrasa o adelanta. Si comienza a hacer más calor tempranamente, comenzarán a verse activas antes.

Lo normal es que en los meses de abril y mayo comiencen su actividad. Lejos de lo que pensamos, no solo “duermen” en invierno, sino que dependiendo de la zona donde viven, puede sufrir una estivación durante los meses más cálidos al igual que en los más fríos. Esto ocurre principalmente cuando los niveles de agua comienzan a descender demasiado y también, en las zonas mediterráneas, algunos ejemplares son capaces de pasar las jornadas más calurosas semienterrados entre la vegetación. Esto lo hacen para salvaguardarse del sol, las altas temperaturas y mantener una humedad constante.

Por todo ello, estas tortugas prefieren zonas cuya vegetación sea muy abundante, aunque se han adoptado muy bien a nuestros embalses españoles. Tras los meses más cálidos, nos encontramos con otro pico de actividad. Tiene lugar en los meses de septiembre y octubre. En este periodo están bastante activas, puesto que las temperaturas han bajado y se mantienen más frescas. La actividad sigue hasta que las temperaturas son tan bajas que comienzan de nuevo el periodo de hibernación.

Suelen ser más activas desde las primeras horas de la mañana cuando hace menos calor. Durante este tiempo, realizan la termorregulación sobre los troncos y otros objetos flotantes. Si nota algún tipo de perturbación se lanza directamente al agua y se dirige al fondo. Para protegerse de los depredadores se entierra en el lecho del lago o río para no ser vista.

En cuanto a su dieta, está basada en invertebrados y en menor medida por anfibios y peces. Un dato importante que yo desconocía es que son un gran depredador de otro de nuestros enemigos: el cangrejo americano. Estos alimentos los complementa con materia vegetal, especialmente en verano. También hemos podido comprobar que entrar sin pudor a los cebaderos y comen hasta llenar el estómago. Por otra parte, mientras ellas estén en nuestro spot, las carpas no entrarán a comer pues estas tortugas son muy dadas a atacar a los peces ya que como he dicho antes, forman parte de su dieta.

Los galápagos tienen una vista y un olfato excelente, dentro y fuera de agua. Saben distinguir formas, colores e incluso pueden reconocer a personas y su gran olfato les ayuda a detectar remansos de agua a cientos de metros, a la vez que tiene un papel importante en la búsqueda de alimento.

Dicho esto, debemos tener en cuenta varios factores importantes:

  1. Nuestro cebo de anzuelo debe de ser de un color discreto que no destaque sobre el fondo. Mis colores favoritos son el del complex-T, Source e incluso Squid&Octopus dependiendo del tono del del lecho del lago. Olvidaros de los colores brillantes pues irán directamente a por ellos.
  2. Nada de popup aunque sean de colores discretos, los atacaran sobre la marcha.
  3. Tampoco usaremos Snowman, sienten predilección por ellos.
  4. Retocaremos nuestro cebo de anzuelo para que no sea de una forma redonda perfecta. Una vez que asimilan la figura redonda con alimento es cuestión de tiempo que nos dejen que hair limpio.
  5. Los cebos aceitosos desprenden gotitas de aceite que suben hasta la superficie. Las tortugas salen a la superficie a respirar y aprovechando su increíble olfato detectaran nuestro spot.
  6. El cebado no debe ser de bonitas bolas, es mejor triturar los boilies, trocearlos e incluso aplastarlos para variar las formas.
  7. Los cebos remojados suelen durar poco en nuestro montaje, mejor usar un boilie directo de la bolsa.
  8. Nada de semillas brillantes en el cebado, son como un imán para las tortugas.
  9. Nos alejaremos de las zonas con vegetación espesa: junqueras, algas densas, árboles caídos sobre la orilla y también de las grandes rocas; es su habitad natural y donde ellas se sienten seguras.
  10. Las zonas someras también son un problema, gracias a su vista encontraran el cebadero muy rápidamente.

 

Teniendo en cuenta estas normas que he aprendido durante mis más de cuarenta años pescando, podrás conseguir picadas de carpas y no perecer en el intento. Espero que la próxima vez que vayas a pescar a uno de estos peculiares escenarios consigas tu objetivo.

Nota informativa: los galápagos europeos están protegidos y supuestamente en peligro de extinción, aunque en el sur son muy abundantes. No debemos dañarlos!

Frank Granados

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